para salir de los agobios...
Estas siete claves que J.M.Vez me ha propuesto poner en práctica pueden ser muy útiles estos días previos al follón de los exámenes. Con el fin de que las que lleváis agobiadas desde casi el comienzo del curso os relajéis un poco, y las que todavía no empezasteis con las histerias sigáis así, las quiero compartir con vosotras:
1. Vacía tu mente.
Reflexiona sobre las cosas que pensamos que tenemos pendientes, las que deberíamos hacer en el futuro y las que tendríamos que planificar de inmediato. Para ello, apunta todo lo que debes hacer, así saldrán de tu cabeza y no correrás el riesgo de colapsarte.
2. Delimita tus áreas de trabajo.
Define y concreta cuáles son las áreas de actividad en las que debes concentrar todos tus esfuerzos. Está demostrado que nuestro cerebro está preparado para procesar entre siete y nueve temas a la vez, a partir de ahí no se maneja con soltura.
3. Define tus objetivos.
Una vez que se tienen claros los campos de trabajo, define los objetivos que queremos para tener una visión panorámica. Los objetivos ayudan a la auto-motivación y a la autodisciplina y siempre sabremos lo que tenemos que hacer.
4. Diseña un plan de ataque.
Es esencial saber cuando hay que llevar a cabo cada tarea para cumplir los objetivos. Trabajar con programas mensuales, semanales y diarios. La semana es un ciclo social y biológico muy manejable por lo que los programas semanales permiten tener un mayor control sobre las tareas a cumplir. Y lo más indicado es tenerlos siempre a la vista o encima de la mesa, así siempre se tienen presentes las actividades que han quedado pendientes.
5. Establece prioridades.
Destina todos los días unos minutos a la planificación de las tareas diarias asignándoles un tiempo de realización. Una hora de planificación efectiva ahorra tres o cuatro en la ejecución. La falta de tiempo en el trabajo es una consecuencia de que dedicamos muy poco tiempo a pensar y estamos lanzados a actuar. Hazlo por escrito porque es la única forma de valorar y hacer tangibles nuestras metas diarias y sobre todo hay que ser realista. Las tareas se dividen en importantes y urgentes, que son las que hay que afrontar (en casos extremos se pueden delegar solamente en personas capaces de resolver por ellas mismas), importantes y menos urgentes, que son las típicas de los listados semanales, y urgentes y no importantes. Por lo general, estas últimas son las que se comen el 60% de nuestro tiempo, mientras que a las otras sólo les dedicamos un 20%. Lo que habría que conseguir es el efecto contrario, es decir, destinar el 60% de nuestro tiempo a los asuntos importantes y urgentes.
6. Practica la flexibilidad.
Es la mejor forma de solucionar los imprevistos que surgen durante cualquier día de trabajo, sin grandes dosis de estrés. La flexibilidad se gana cuando cumples con una planificación semanal, es decir si surge cualquier problema y tienes claros los asuntos a resolver esa semana, es más fácil hacer un cambio en la agenda sin que suponga un trauma. La planificación te da una visión de futuro y además elimina un gran porcentaje de crisis ya que al programar actividades, puedes preverlas.
7. Defiende tu hora tranquila.
Tan fundamental como programarse es tener en cuenta dentro de la planificación un tiempo diario para evaluar lo que se ha hecho y cómo se ha hecho, así como para organizar las tareas del día siguiente. Lo mismo ocurre al final de la semana. Es muy útil considerar este tiempo tan importante como si se tratara de una cita con algún cliente, manteniendo una política de puertas cerradas. Cuando conseguimos convertir estas reglas en hábitos de trabajo se mejora considerablemente nuestra organización.
Tampoco hay que llevarse las manos a la cabeza si a veces se rompe el esquema de trabajo, las personas fluctúan en periodos de caos y de orden. En principio esto no es malo, incluso en momentos determinados puede fomentar nuestra estimulación, el problema está cuando nos dejamos llevar por las fluctuaciones y nos convertimos en auténticos indisciplinados.
3 comentarios
mariña -
Mónica -
Berta -
gracias por los consejitos, pero no sé si seré capaz de ponerlas en práctica!!!
no es exageración, voy fatal de tiempo!!!
tenía pensado hacer mucho más de lo que hice en las vacaciones...me imagino que eso nos pasa a todos...
voy a intentar poner en práctica los consejos a partir de mañana... voy a hacer un planning... ya te contaré...
besiños